COMENTARIOS PARA LECTORES OCASIONALES

Inauguré este sitio con 5 artículos que ya tenía escritos, entre 2003 y 2005. Algunos analizaban un momento particluar y pueden sonar desactualizados, pero en la mayoría de los casos son hechos cuyos efectos perduran.
A partir de ahí voy subiendo mis comentarios que considero más interesantes para el público interesado en temas políticos. En general tratan temas de política internacional, de Argentina y Latinoamérica. Muy rara vez escribo sobre la política local de mi provincia, Tucumán.
Espero que disfruten del blog.

martes, 20 de junio de 2017

EL SUSTENTO FILOSÓFICO DEL GARCA

Es indudable que Mauricio Macri no es un asiduo lector. Pero para darse lustre durante los años previos a su arribo a la Casa Rosada mencionó uno que otro libro de cabecera. Y a la autora que más se refirió es a Ayn Rand. Una “pensadora” nacida en la Rusia zarista (1905) como Alisa Zinóvievna Rosenbaum y radicada a los 20 años en USA donde permaneció hasta su muerte en 1982. Ella creó probablemente la peor de las filosofías surgidas del siglo XX dónde califica al altruismo y al amor al prójimo como “inmorales”. Esta es la persona cuyas ideas han guiado a nuestro presidente. Y soy generoso con eso de “nuestro”. Esta autotilulada “filósofa” pensaba que todos los programas de ayuda social y salud pública (expresamente citaba a Medicare, el legendario programa de salud de su patria adoptiva) eran “para los débiles” y que “ser egoísta” es lo mejor que se puede ser. Este repudiable personaje que fumaba dos paquetes de cigarrillos por día aceptó, disfrazada bajo el apellido del marido, justamente ese servicio de salud y ayuda social en su vejez ya que enfermó y finalmente murió de cáncer de pulmón. Pensaba que las advertencias de “los débiles” por el daño que podía causar el cigarrillo era una teoría conspirativa contra las correctas y necesarias grandes corporaciones tabacaleras. Que la realidad no arruine una corriente de pensamiento. “La idea de tener una mujer presidente es indecible (unspeakable)”. Palabras de una mujer. 
Sigamos con la inspiradora de nuestro genial mandatario: “Los discapacitados son niños ‘subnormales’” y que la asistencia gubernamental a ellos es bajar a todos los demás al nivel de los discapacitados. ¿Es pura casualidad, error de Excel, o descuido lo ocurrido la semana pasada? Dejo al lector las conclusiones. Un personaje al que Ayn Rand llegó a admirar fue William Hickman. ¿Quién? Literalmente un asesino serial de la zona de Los Angeles. Entre sus andanzas descuartizó a una niña de 12 años, arrancó sus órganos internos y arrojó lo que quedaba de su cuerpo mutilado sobre una avenida con los párpados atados con alambre para que parezca aún con vida (según relata el investigador Michael Prescott). Sobre este crimen Hickman declaró: “Lo que es bueno para mí está bien”. (What is good for me is right). Sobre esta declaración Ayn Rand comentó: “Es la mejor y más fuerte expresión de la sicología de un verdadero hombre que escuché.” (The best and stongest expression of a real man’s psychology I have heard). Esta mujer es la que tu presidente admira. Noten que le solté la mano y que cada votante se haga cargo. Esta expresión no fue un exabrupto al descuido sino una afirmación absolutamente acorde a los principios filosóficos de Rand que sostienen que si podés tomar algo lo debes hacer. Ella considera que entre las personas hay “tomadores” y “hacedores” (takers and makers). Ella y sus seguidores se consideran “hacedores” porque no “toman” ayuda del gobierno pero consideran perfectamente bien “tomar” del prójimo si es posible. Eso demuestra que no estás atado a los dictados de la sociedad, no sos altruista ni estás inclinado a ayudar al prójimo. Sos un INDIVIDUO. Hickman tomó la vida de una niña de 12 años simplemente porque podía. Loable. La teoría del Superman, música para los oídos de todo garca que adora el capitalismo salvaje y prebendario y que le importa un carajo los débiles, los vulnerables, pobres, discapacitados y por supuesto al socialismo, los solidarios, altruistas y cualquiera que tenga algo de sensibilidad social. En USA Paul Ryan es uno de los políticos que declara que su filosofía se basa en las ideas de Ayn Rand. En Argentina Mauricio Macri. Sorprenderse porque los “errores” cometidos al eliminar ayuda social, calcular mal jubilaciones, entregar los fondos del Anses a una timba privada, declarar que los convenios colectivos deben reformularse a la baja, dejar de dar remedios, netbooks y todo tipo de asistencia a los más necesitados mientras se rebajan impuestos los más ricos, tomar constantemente deuda en nombre de todos para beneficio de pocos es no conocer el sustento ideológico de esta gente, con Macri a la cabeza, que cooptaron prensa mediante el aparato estatal de la Argentina. Cuatro años les sobra para devastar al país, dejar un siglo de deuda por delante y en la absoluta miseria e indefensión a enormes sectores de la población que no pudieron disfrutar y engancharse en esta “veneración del egoísmo” que promueve la deplorable filósofa que tanto admira nuestro querido mandatario. Vos lo votaste, no yo.